La cremación o incineración es un tipo de tratamiento que se da al cuerpo de una persona que ha fallecido. Se trata de la combustión del cuerpo a más de 800ºC durante 2 o 3 horas dependiendo las características físicas de la persona y la potencia del horno del crematorio (lugar con las herramientas e instalaciones necesarias para la combustión del cuerpo humano).
Existe desconfianza porque como tal no podemos observar el proceso, primero por cuestiones de sensibilidad, y segundo por cuestiones de seguridad, aunque hay algunos crematorios o funerarias que permiten ver la entrada del ataúd al horno, pero hasta ahí.
Sin embargo, para la realización de una cremación, hay que cumplir con cierto protocolo, no se puede hacer una cremación sin seguir una serie de pasos, por eso es un proceso realizado por profesionales para garantizar que el cuerpo de tu familiar sea incinerado correctamente.
El crematorio debe de formar parte de una agencia funeraria.
Como ya dijimos, solo los profesionales pueden realizar este proceso, las agencias funerarias tienen los permisos, las instalaciones y la experiencia para realizar una cremación.
Autorización de los familiares.
No se puede realizar la cremación de un cuerpo sin tener antes la firma de los familiares autorizando con el conocimiento previo del procedimiento que se va a realizar. Es una garantía tanto para los familiares como para la funeraria.
Preparación del cuerpo.
El cuerpo puede ser incinerado con pertenencias y ropa, si el difunto tiene un marcapasos o válvula baipás tiene que ser retirado antes de la incineración ya que pueden provocar una explosión ante la exposición de altas temperaturas. La joyería que pudiera llevar el difunto es devuelta después del proceso.
Preparación del ataúd.
Hay ataúdes de menor costo que están destinados específicamente a la cremación, pueden ser de madera o de cartón corrugado. En el caso de haber elegido un ataúd más elaborado se le retiran las decoraciones y ornamentos metálicos.
Cremación del cuerpo.
Combustión del cuerpo a más de 800ºC en un intervalo de 2 a 3 horas.
Enfriamiento de las cenizas y refinación.
Después de la combustión del cuerpo hay que dejar reposar las cenizas al menos 30 minutos, se pulverizan los restos óseos ya que solo quedan carbonizados; y como segunda y última fase se realiza la refinación de los restos. Asimismo, se separan los restos humanos de otros restos (ropa, féretro, prótesis).
Entrega a los familiares.
Depende de la funeraria donde se realice el tiempo de entrega, generalmente se puede hacer la entrega el mismo día en la urna de elección, las cenizas reposan dentro una bolsa de terciopelo.
Entonces, como ya vimos, es un proceso bien regulado si se realiza en una agencia funeraria legítima, en algunas funerarias incluso como garantía meten una pieza de metal indestructible con una numeración que se entrega junto con las cenizas para comprobar que son solo los restos de tu ser querido. También, no hay que olvidar que es ilegal incinerar dos cuerpos al mismo tiempo en el horno del crematorio, así como también incinerar cuerpos humanos con animales, sobre todo por sanidad y la seguridad de todos.
Memorial Metepec
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