
La familia es una de las principales bases para el desarrollo humano, es en la familia donde se obtiene mayor parte del aprendizaje ético, social y conductual. Cuando hablamos de familia nos referimos a las personas con las que tenemos un vínculo cercano, usualmente hay un parentesco de sangre o legal, y son las personas con las que pasamos más tiempo y construimos un hogar.
Del tipo de relación que tenemos con nuestra familia dependerá el tipo de relaciones que tendremos con otras personas, es por eso por lo que es importante tener una buena relación familiar.
Si queremos tener una buena relación familiar se tiene que fortalecer constantemente con convivencia de calidad, valores familiares, comunicación y amor. Para que existan personas seguras, con amor propio, independientes y respetuosas con relaciones sanas en su vida, una relación familiar estable es clave para que alcanzar este desarrollo personal.
Estas son algunas recomendaciones para fortalecer una relación familiar saludable:
1.-Pasar tiempo en familia
En primera instancia hay que pasar tiempo de calidad en familia, esto quiere decir que hay dedicar total atención durante el tiempo que convivimos en familia. Se pueden realizar diferentes actividades, desde las labores del hogar, actividades educativas y hasta actividades recreativas. Se trata de compartir momentos juntos.
2.-Comunicación
Una relación sana con la familia comienza con la comunicación, es necesario que cada miembro de la familia se sienta con la libertad y la confianza de expresar sus emociones, sus gustos y sus logros. Es por medio de la comunicación que nos conocemos, generamos vínculos y resolvemos conflictos.
3.- Empatía y comprensión
Cada persona tiene una experiencia diferente que impacta en su vida de forma diferente, es importante tomar en cuenta las emociones, la perspectiva y las razones que tiene un familiar, ponernos en los zapatos de los demás nos ayudará a comprender sus actos y a crear confianza y seguridad uno con el otro.
4.-Respetar el tiempo y la privacidad del otro
Hay que respetar los límites del otro, cada miembro de la familia tiene sus actividades, su espacio y sus necesidades. Si queremos forzar a un miembro de la familia a estar presente todo el tiempo y/o a que muestre lo que hace todo el tiempo, se va a volver contraproducente en la relación provocando discusiones, inseguridades y en general emociones negativas.
5.-Apreciación mutua
Cuando apreciamos lo que un miembro de la familia hace por nosotros lo motivamos a que lo siga haciendo, y al mismo tiempo le damos la importancia que se merece el tiempo y la dedicación que nos dio con esa acción o ese detalle; asimismo, cuando apreciamos sus logros ayudamos a construir su autoestima y su confianza. Si simplemente cuidamos un ambiente familiar positivo siguiendo los valores familiares, y escuchando y compartiendo nuestras experiencias y emociones, tendremos como resultado una relación familiar sana con un vínculo cercano bien fortalecido basado en la confianza, el respeto y la empatía.
Ahora más que nunca hay que incentivar una convivencia sana y agradable, porque de nada sirve estar juntos si hay un ambiente tenso e hipócrita; más bien, apostemos por momentos memorables llenos de amor y felicidad.
Comentarios